Supiste darme amor y tu ternura,
A ti canto hoy con alegría,
Y es placer brindarte mis cantares.
Tus ojos son la luz de mi sendero,
Tus labios son acaso mi dulzura,
Tus manos torrente de caricias,
Y tu cuerpo, el mar de mis delicias.
Tus ojos como estrellas,
son luz en mis tinieblas
y brindan paz y gran sosiego,
Alumbrando así los pasos de m vida.
Tus labios brindan la dulzura de sus besos,
En sus palabras escucho el animo en la lucha,
Su silencio… remanso de paz y de quietud,
Y sus gestos aprueban o reprochan mi actitud.
Su cuerpo, armoniosa melodía
Y toco en cada parte, arpegios
De amor y de ternura,
Simbolizando en dicha
Cuando alcanzo el placer de
Poseerlo.