Esta historia, que parece una fabula más
un relato prefabricado, común y repetido
es tan real y verdadera, como talvez jamás
en el mundo entero…haya otra existido…
Fue allá por los años 90´s, 1999, exactamente
cuando la novedad del momento, era aquella
magia del Internet,(que se movía lentamente)
el Hotmail, era el “bum” social, la gran estrella…
Fue por ahí, que conocí, a una dama muy bella
nunca supe su nombre, Alondra, era su seudónimo
tenía el candor de un ángel, y su mirada destella
luz del cielo en sus ojos, en ella no había antónimo…
Me dijo ¿Cómo te llamas?, y le dije soy “Bruno”
(le mentí como ella a mi) para mantenerme anónimo
Y emulando una novela, llamada “Alondra y Bruno”
fue genialidad, porque pude haberle dicho, Jerónimo…
Eso la enamoró, nunca pensó que fue planeado
creyó que el destino fue, el que nos había unido
y desde ese instante, amó a ese “Bruno”, creado
con un amor tan fuerte, como jamás había querido…
Versos iban y venían (ya estaba yo enamorado)
le pregunte de donde era, en que lugar ella vivía
¡que dolor! amarga pena, quede yo tan destrozado
resultó que mi dulce Alondra, en Panamá residía...
De Ecuador a Panamá…1237 km? quien diría
ahí se acabó este amor de Internet, por distancia
y desde ese día juré, que nunca más yo volvería
amar a dama lejana, sin importar su elegancia…
CAZA
10/05/2014