UNA TARDE EN MI EXPOSICIÓN
Era una tarde de lluvia. Estaba frente a un maravilloso ventanal acompañado de mis pinturas y una luz tenue posándose sobre mi piel y mis lienzos, dejando un juego de luz y sombra. Al otro lado se ve un cielo grisáceo, la calle humedecida. Pasa poca gente, mirándote raramente. La manera de mirar me hace sentir como si estuviera en otra época, con mis sueños, mis pensamientos y mi nostalgia. Mis sueños quedan flotando, acompañando a mis lienzos. Mis pensamientos ven el retrato perfecto de la vida y, cerrando los ojos, me ilusiono que tenemos otro mundo mejor , sin odios ni guerras. Pero cuando mejor estoy en mi creación, me llega la cruda realidad de tener que traspasar ese umbral que me devolverá a ese mundo donde nos tocó vivir, con esas mentiras, ese odio hacia el prójimo y esas guerras interminables. Si pudiera sellar esa puerta, ya que son muchas las razones por las cuales podemos desear su cierre perpetuo y así disfrutar de un universo perfecto que todos deseamos. Maynat