la muerte la alcanzába en pleno puente,
el pico ponzoñado por la espalda,
entre gaviotas anda el juego,
el río se tiñó de sangre roja.
moría la esperanza del déspota,
la diáspora llegó con la mañana,
sonaron tres disparos que del norte
alcanzaron la carne envenenada.
quizás murieron más, los sentimientos
encontrados al fin sobre el bernesga,
yacían en en suelo los regalos
de aquella navidad de grana y oro.