En el copo del jabillo frondoso
Canta tierna canción
A su ave amada el ruiseñor airoso
Cundido de emoción.
Un canto a la libertad y al orgullo
De sentir que a la amada
Su cántico es un cántico de arrullo
que leve la traslada
A angelicales valles siderales
Donde el tiempo no cuenta,
Ni el espacio, ni los ruidos fatales
Ni la letal tormenta.