No puedo vivir
con las huellas en la arena.
Tengo que seguir
y olvidar lo que ya fue.
Quedarme es mentir
a mì misma porque ayer
dejè de insistir,
y me hice creer que en la vida
se debe seguir.
Aquì sentada alcanzo a ver
que hay murallas,
que como un parpadear
de luz podràn caer.
Por eso debo recordar
que no todo està perdido;
siempre hay
esperanza en el camino.