LIZ ABRIL

CUANDO MIRO TUS OJOS

Cuando miro tus ojos 

y me pierdo en su abismo, 

todos los acertijos 

encuentran la respuesta. 

Eres la pieza ausente 

en mi rompecabezas. 

Tú me hablas y yo escucho, 

grabo bien tus palabras 

para desmenuzarlas 

buscando alguna clave, 

para cuando tus pasos 

se alejen tras la puerta 

y me asalte el recuerdo 

de tu espalda alejándose... 

hasta el próximo encuentro. 

Absorbo tus palabras 

cual añejo licor 

bebido sorbo a sorbo.

Cuando miro tus ojos 

ya no veo tu cuerpo. 

si la piel se te arruga, 

si caminas más lento. 

Si el cabello con canas 

te hace tal vez más viejo. 

Cuando miro tus ojos... 

yo veo al hombre que amo, 

puedo leer en ellos 

tristezas o alegrías, 

ternura o soledad, 

secretos o mentiras.

Tú no te das ni cuenta, 

caigo en el precipicio

sin fin de tu mirada,

 sin frenar la caída, 

aunque sólo quisiera 

aferrarme a la orilla, 

con los puños cerrados 

mirar para otro lado.

Se revuelven mis tripas, 

se anuda mi garganta, 

siento un frío en el cuerpo 

que hasta el alma me cala.

Cuando miro tus ojos

todo a mi alrededor 

se transforma en la nada

y nada importa más

que arrojarme un instante

en ese abismo negro

y hondo de tu mirada.