Ésta madrugada soñé con ella, y soñé que me decía:
\"Que mal lo que hice, no debí hacerlo.
Me arrepiento totalmente por haberte abandonado.
No supe valorarte ni lo que serías,
solió ser que eres la más bella persona... eso no lo sabía.\"
A lo cual respondí con una sonrisa y una mirada.
Dije: Calma, yo soy quien siempre he sido.
Un amor pobre, un amor humilde que jamas has vivido.
De qué sirven hoy las palabras? lamentarse no sirve de nada.
A lo que se voltea con la mirada al vacio
yo le digo:
\"Tranquila, no estes triste, no te sientas mal.
Los días pasan a como yo pasé en tu vida;
ayer la luna fué tuya, hoy las estrellas son mias.\"
Y se fué, jamas volvió. Qué le habrá ocurrido?
Aún la espero en la puerta de mi casa
sentado en un sillón. Qué más habrá vivido?
Aún la espero viendo como el tiempo pasa.
Ricardo Manzanarez (Nicaragüense)