¡Cuándo! fue la última vez
que el segundo domingo de mayo
venciendo cualquier revés
tuviste a tus hijos a tu lado.
¡Cuándo! este domingo de mayo
como en su niñez y adolescencia
ellos te cobijaron en sus brazos
y no fue solo una llamada en la distancia.
¡Cuándo! fue que este día siempre soleado
sollozaste de felicidad en sus brazos
y ellos se entregaron en tu regazo
quedando con todo tu amor enlazados.
¿Cuándo será el día? que nuevamente
vibrarán nuestros corazones unidos
y reiremos todos juntos a carcajadas
y en tu honor, recitaremos poemas juntos.
Hoy me queda solo pensarte, madre mía,
forzarme a retener mis lágrimas
mirarte en todos lados y sonreírte
susurrar al viento que te lleve mil abrazos.
Quiero hacerte llegar un “Te Amo mamá”
en una brisa que acaricie tu rostro,
quiero que olvides un momento,
esta distancia de ya casi un lustro.