Tus cabellos no son de oro,
pero son mi tesoro.
Tus ojos de acacia y limón,
son mi inspiración.
Un titere mentiroso ha de envidiar
tu nariz, sin dudar.
Tus rebordes carnosos,
sin pretenderlo
son deliciosos.
Tu pecho hecho en el cielo
con esquinas de cristal,
es mi perdición.
Tu vientre moldeado por dioses
es mi seducción.
Si has de ser piedra
yo tropiezo.
Si has de ser el sol
ciego me quedo.
Si has de ser agua
ahogado yo muero.
Al cruzar miradas
en un mar me pierdo.
Al besar tus labios
subo yo al cielo.
Tan perfecta eres
que sin ti he de enloquecer.
Poco tiempo
yo lo entiendo,
pero ve en mi
todo mi sentimiento.
Porque ya te conozco
aunque no lo hago.
Porque si tu cambias
a la perfección llegamos.
Porque tu no olvidas
eso me fastidia.
Recuerda amor,
Lo nuestro es tu cuestión.