Estaba sentado, sobre la vida
me buscaba entre mis mascaras, tal vez te buscaba
palpitaban las melancolías, en mi pupila
naufrago de pieles blancas, me ocultaba en días grises
la caída de la noche es el refugio de un ciego
que busca tu mirada por debajo de la luz
al tacto, caricias sobre damas sedientas de pasiones
-¿Sediento yo de ti?
La mire acostada, entre las sabanas
Su calor, se fundió con placer entre las luces apagadas,
Yo me preguntaba
-¿Todavía piensas en mi?