El aljibe de mi covacha está
lleno de agua abundosa
que al grato jardín mucha vida da
para que la alba rosa,
El geranio, la azucena y el jazmín
Derramen su fulgor.
En el cielo un travieso serafín
Cabalga con candor.
Es el aljibe un pozo del deseo
Donde la amada mía
Lanza una moneda y en su rostro leo
Su gracia y su alegría.