Hoy quiere sentir el alma mía
reposando en tu regazo,
la sutil caricia de un abrazo,
sintiendo tu calor en armonía.
Rescatar de tu aliento su tibieza,
embeber lentamente la pasión
que en latidos genera el corazón,
y de tu pecho sale su grandeza.
De mis labios brotarán murmullos
que gesticulando, quedamente
se apoderan de los tuyos.
Aprisionándome tiernamente,
siento ciertamente los arrullos
de tus manos...¡lentamente!.-
Por: Alejandro O. de León Soto
Tijuana, BCN, MEXICO, Mayo 25/14