John morales

Invierno en ausencia

¡Ay!, crudisimo invierno frío,

aquí la soledad vistióse de yeso,

murió de ausencia, de preludio mis sesos,

los epitafios que han de estarse son míos.

 

Mira que la noche es grana y sin devoción!

y, se llora horribles mausoleos, golpea

iracunda la cenagosa noche,

y, lastima mi corazón.

 

¡Qué no daría yo, por tenerla infinita,

frente a mis ojos, imaginando al viento,

olvidando su absurdo regreso,

y, el aedo muriendo!

 

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John Morales Arriola.