Es curioso, y a su vez hermoso
como un poeta le escribe
a la felicidad o quizás tristeza,
a la Naturaleza, a lo tangible o
intangible, él, Vive creyendo hasta
hasta el final de sus días en lo
inexistente, en aquello que quizás
No escribió al no encontrar los versos
correctos, y en lo bello... que quizás,
jamás será leído.
Él, quien en su lecho seguirá
recordando aquellos versos
e imágenes destellantes,
donde Su voz reflejará Su ser,
Su sabiduría y Su esencia,
durante toda una eternidad siendo
un Poeta enamorado de su Existencia,
Enamorado. De Su Amor.