Quetzalli

Hace falta…

hace falta divagar en tardes nítidas, como esta,
hace falta una botella de vino hablando de todos y de todo,
hace falta olvidarse del tiempo y de momento voltear al reloj para pedir, casi suplicar que corra más lento, hace falta que comience a llover, que yo susurre ‘’quédate’’ para que no corras peligro
hace falta cerrar las ventanas, apagar las luces, poner seguro a la puerta, 
hace falta llenar el lado izquierdo de la cama,
hace falta que alguien se beba esta taza de café que ya se está enfriando ,
hace falta hacerle un hueco al gato, que duerma de mi lado, que no acapare tu espacio,
hace falta acelerar el paso, para llegar a donde debemos
hace falta perderse, lento , muy lento en una piel que no queme pero que tampoco helé
hacen falta carcajadas, también llantos,
hacen falta los viernes de compañías casi amargas y forzadas
hacen falta los domingos de suicidas, de esos que se matan con amor.

Hacen falta muchas cosas, haces falta tú.