Cosas sencillas
quiero yo en esta vida.
De lo superfluo y banal
puedo perfectamente pasar,
entre mis hobbies, leer y pasear
y si me es posible viajar
aunque con los tiempos tan revueltos que corren
donde mejor voy a estar
que en mi casa y con los míos
¡eso es felicidad!.
La ropa no es un problema,
no soy esclava de la moda
pues primo la comodidad
vistiendo a mi modo,
resaltando mi feminidad.
Las joyas no me apasionan
sí la bisutería, ¡la que brille más!
me gustan las piedras
y lo que ellas pueden comunicar.
Yo no quiero brillantes
prefiero un beso dado con intensidad,
los regalos me gustan
pero prefiero un te quiero dicho con sinceridad.
De la hipocresía escapo
pero no del cariño dado con generosidad
del abrazo de mi madre, padre, hermano
no dudaré jamás.
Me gusta la soledad buscada
pero también rodeada de gente estar,
me entretiene ver a un niño
jugando y riendo con los demás.
De la mano ir contigo,
que me des un beso sin más
todo ello es mi riqueza
¡para que quiero más!.