Antes de ti nada era mío,
Vague por las calles, navegue por mares inciertos
Nada tenían sentidos, nada tenían nombres
El universo era del aire que esperaban el vuelo de los corazones.
Yo conocí seres sin almas,
Túneles habitados por lunas sin luz
Casas crueles que se despedían,
Dejando el vacío en mi ser
Preguntas que eran solo polvos
Todo estaba vacío, muerto solo silencios,
Abatido seguí rodando por callejones fríos
Donde mi alma, caída, abandonada ,
Saborean el agrio dulzor de mis abismos y miedos,
Todo era inalienablemente ajeno, lejano.
Todo era de alguien mas o de nadie, de otros,
Hasta que tu hermosura y tu inocencia.
Llenaron mis inviernos de obsequios,
Entonces mi corazón se lleno de color y luz,
Volvieron las esperanzas y las alegrías,
Nació una rosa en mi corazón.