Graciano Chacon

CUANTO QUISIERA VERTE

 

 

A: la poetisa, Axtric del pilar

En ciudad Curicó, Chile


Cuanto quisiera verte

amor enternecido,

mis ojos casi vuelan

queriéndote encontrar,

mirando en la distancia

que se me aleja más.

Mi corazón endeble

se muere de tristeza,

se niega a soportar

la ausencia de tu amor.

Ya no tengo sentido

 mi vida se consume

 y cuando estoy dormido

delirio mucho más.

No sé si en este viaje

 pagué todas las penas,

no sé si aún yo deba

pagarlas mucho más.

Y en noches de desvelos

Hablando yo con ella

sin poderme callar

le repito entre dientes,

si pienso en la distancia

te quiero mucho más.

Muchas veces me toco

mi pecho ya con miedo,

pensando que agoniza

mi pobre corazón.

Y luego que lo escucho

sonar muy lentamente

retorna mi alegría

y lo quiero mucho más.

No conozco sus labios,

mucho menos sus besos

se mueren mis deseos

sin poderlos tocar,

y se mueren mis ansias

sin poderlos besar.

Como quisiera verte

-amor enternecido,

es tanto lo que sufre

mi pobre corazón,

que vive en agonía

en busca de  tu amor.

No sé si es que te quiero;

no sé si es que te amo,

no sé si es que te adoro,

pues hasta tengo dudas

de que esto sea amor,

Debido a la distancia

que existe entre los dos,

 y cuando pienso en ella

doy gritos de dolor.

Un amor a distancia

jamás había tenido

espero que sea el último

que me toque vivir.

Yo le tengo grabado

su mínimo mensaje,

los estoy escribiendo

en letras de cristal.

Me conformo con ver

 su nombre en el altar,

las campanas entonando

nuestra marcha nupcial.

Me confieso ante ella

que es toda mi razón,

que nunca había vivido

en mi vida nada igual;

un amor a distancia

unidos por los hilos

de la modernidad,

y el don de la palabra

 la fuerza que nos da,

y cuando queda oscuro

padezco mucho más.

Le he escrito muchas cartas,

muchas cartas  de amor

buscando algún alivio

 que calme mi dolor

las cartas sin destino,

origen, dirección

retornan a mi nombre

de nuevo a mi buzón

y para nada calma

o alivia mi dolor.

 Y como consecuencia

de este amor irreal

la vida nos prohíbe

por los cielos volar.

Espero me perdones

si en esto lo hago mal…

Autor: Graciano Chacón  Moncada