Permíteme solo unos minutos
le prometo no volverla a molestar,
seré breve se lo aseguro
es preciso confesar
Me es muy indispensable
su presencia en mis sueños,
al despertar ni siquiera puedo
dejar de pensar en sus besos
Se me ha vuelto cotidiano
declamarle alguno versos:
usted es el agua yo el fuego
solo un beso es lo que quiero
para calmar el ardor en mi pecho
Espera no soy como el perro
me llamo enrrique y soy sincero
no miento al confesar mis sentimientos
se lo juro soy de los buenos
La quiero y lo siento
perdón tengo miedo
no quiero ser grosero
pero siento celos
Como la balada de camilo sesto
ese dulce sufrimiento
que te quema a fuego lento
que me hace tu enemigo
Disculpe por ser tan inoportuno
pero no aguantaba más silencio,
utilizo este medio por ser tímido
pues me haces perde el aliento
Me atas, desatas
liberas, me amarras
me dejas en garras
de la cobardía quemar