Me abruma el bullicio de la mañana,
camino sin rumbo y con desazón
con congoja, arrastro una
cerrazón,
toda mi humanidad está cansada.
Siento que me abandona la razón,
que mi ser libra una dura
batalla...
Mi instinto de supervivencia...gana;
¡que fea y amarga es la depresión!
Quiero alcanzar una paz
interior,
no quiero sentir una bronca vana
tampoco quiero enojo y confusión.
Marcho triste; miro...sin mirar
nada,
me sigue mi sombra y convoco al sol,
a la \"luz\"...mientras, un perro me ladra...
Adolfo César (NAZARENO)