Nerea Acosta

FIN DEL JUEGO

Un día más,  una noche más y tu no llegas.

Caminar sin rumbo,

sólo buscando lo que me niegas.

Me llevas de la mano por mi sueño,

paseando entre fantasmas que te alejan.

Máscaras multicolores que tapan,

el dibujo enamorado de tu cara, de tu nombre.

Te diluyes entre musas que te ocultan,

Y  yo, sirena triste, nadando en esta mar a solas.

Mi paso se hace lento y cansado,

buscando entre tus letras que se pierden.

De noche te haces nieve entre mis manos,

para arder en fuego en las de otra.

Sabor amargo en cada noche agónica,

cuando recuerdo me decías ser la única.

Te acercas manteniendo esa distancia y juegas,

sabiendo que mi alma herida, solo llora.

El juego se ha convertido en tortura, lo dejo,

en mi ya no cabe más amargura.

Lucharé para salir de este abismo donde yo misma,

me procuré entrar, para vivir sin vida

Momentos para liberar las palabras, que atada,

    me han mantenido a una quimera.

     Me alejaré, ahora que es el tiempo,

  hasta que el viento ya no me hable de ti y calle.