Hoy, quisiera escribirte, con las palabras justas
con la gracia del buen decir
con el corazón y la razón
con mis manos cálidas.
Mis ojos viéndote de frente
tu cuerpo palpitante, junto al mío.
pero este papel, maldito, sin tiempo
blanco, profundamente blanco
enceguece, como la nieve al sol
y la mente se esfuerza por caminar
los senderos de la palabra
pero hoy, apenas se arrastra.
Como puedo yo llegar, a vos
si estoy, aquí varado
en este desesperante, papel blanco.
puedo mandarte mensajes
puedo enviar palomas
puedo gritar
pero qué puedo hacer
si el papel, sigue en blanco.
Amada de ideales lejanos
cómo puedo enviarte mis manos
y como aves generosas
en tu cuerpo posarlas.
En qué vientos debo
yo soltar mis besos
hechos nubes
para que lluevan
lentamente, sobre tu piel.
Que puedo hacer
con este maldito papel
tan blanco como la nieve
tan estéril de palabras…