Las paredes están sucias
los pies sudados
el alma podrida
la razón divagando
yo sentada
encogida y temerosa
días de despedidas al amanecer
manipuladores y grotescos como la poesía cerebral
La insegura, la de pasos tambaleantes
la de silencio de muertos
saciada de dudas
doy permiso al dolor
a la tristeza, al orgullo.
al egoísmo , a la envidia,
al pesimismo,al vacío
A ti humana tristeza
te doy permiso