Ave fénix que al cielo aplaudiera,
lino, prado sembrado de estrellas,
caminante que has hecho el camino
disfrutando de las cosas bellas.
De tu Galiza, origen divino,
al destete ¡feliz primavera!
embriagado por ansias de vino
a labrar fuiste a la sementera.
Combinando las noches de farra
de morriña que agrava la pena,
cual racimo que abraza la parra
ilustraste tu luna serena.
Siempre el norte marcó tu destino,
tus afectos llevaron al norte,
compartiendo tu amor, Avelino,
libre fuiste sin un pasaporte.
¿Dónde quedan los sueños perdidos
que pensaste acoger en tu almena?
el otoño ya te ha sorprendido
mas ya tienes la vasija llena.
Y una vez que has subido al altar
y que el futuro a ti no te aterra,
nunca tú deberás olvidar
do partiste que es la túa terra.