Si dijéramos que somos
lo que nunca fuimos,
si nos mintiéramos a nosotros mismos,
en creer que es real,
la irrealidad de una luciérnaga en medio día
y que su luz es tan fuerte que enceguece las pupilas…
A veces la noche es un cántaro
donde se desagua la nostalgia
y el día la desnudez
de la muchedumbre que deambula…
No se si me entiendes
que después de sentirte
viene la ausencia convertida en vacío…
Y yo te busco,
como se buscan el sol y la luna
o como
se acaricia el cielo y el mar…
y no te encuentro….
Entonces…
todo es ausencia
que murmurara en mi mente…
pues me falta tú, amor mío;
quizás no habría
este mezquino sentimiento
acomodándose en la almohada
por las noches de insomnio,
ni dejaríamos escapar
entre las rendijas de la cordura
a ésta soberbia que murmura;
cuanto me haces falta…
Si dijéramos que no nos duele
ésta distancia que nos cobija…
Si nos inventamos una mentira
para sacar a flote este sentir en el pecho
que vocifera
¡amor!
¡te amo y te extraño!
como se extraña lo que no se tiene…
mentiríamos que a veces
solo a veces
nos lloramos,
nos extraños;
pero nunca… amor…
¡jamás nunca!
dejamos de pensarnos
y de amarnos…
Del capítulo: A pesar de todo es Amor...
Andra Neira Chile 2014.