Como una estampida, como un ciclón,
Con el ímpetu ardiente del primer amor
Así lo amé en días de infinita pasión
Cuando yo era un planeta y él era mi sol.
Como intenso torbellino y furiosa tempestad
Con la fuerza de mil mares que quieren estallar
Así mi alma y la suya sin poderlo evitar
Se unieron para siempre en un mágico ritual
Así más allá del tiempo con todo su afán
Hay espacios de encuentro en un universo especial
Donde aún puedo amarlo con toda la intensidad
de la ternura infinita que no acaba jamás.