Estas sin mí, aleteando
Perdidamente en el mar
Invisible del viento, en un espacio vacío,
Donde mi cuerpo no cae.
El sol te quema y tuesta
Entre tus blancos.
Estás tan triste que lloras
Y la tierra recibe sin protesta
Tu sabor;
Sabor de días, impregnados de nervio,
Felicidades y tantos más;
Los entregas al viento
Como quien olvida y vuelve a nacer,
Estás seca de nuevo.
Estás blanca y sin mancha.
Estás lista para enfrentar,
Más trabajo, más nervio, más angustia
Más suciedad, junto a mí.