A pesar de los malos entendidos
y las vueltas en mi cabeza
mi amor sigue intacto
y por tu regreso mi alma reza.
Mi corazón no sabe olvidar
las caricias de tus manos,
tus besos encantados
ni el sentir de tu mirada.
No comprendo el amor
y sin embargo lo amo
desde el día de tu llegada.
Has llenado mi existir,
has guiado mi escencia,
te convertiste en mi ilusión
y en la fé de mi esperanza.
Mi niña, quiero ser
ese quién te haga volar
por cielos llenos de estrellas
y te lleve a saludar
a cada luna llena.
Mi niña, ¿crees que lo pueda ser?
ese que te bese
por dentro y por fuera,
ese que te acompañe
en tus caídas y tus proesas.
Sólo quiero saber
si puedes perdonar una vez más
a este desdichado enamorado
que quiere dejar de equivocarse a cada paso
para ser eso que esperas...
JCEM