Déjame naufragar por el océano donde navegan los sueños,
serpenteando a las olas que impiden consolidar mi deseo.
Déjame volar por el cielo donde transita tu cuerpo,
y acariciar, por un momento, el paraíso perfecto.
Quiero que regresen esos tiempos eternos,
y encontrarte antes que la Luna me sorprenda de nuevo.
Déjame naufragar en este lago desierto,
y flotar al compás de la furia del viento.
En esta trayectoria de desvíos inciertos,
¿Cuál será el camino correcto?
Y si los sueños se confunden con los recuerdos, (¡Qué importa!)
quiero encontrarte para besarte de nuevo.