Tengo la necesidad
de decir algo que siento
dentro de mi pecho, la verdad
que grita en mi pensamiento...
No sé si se han dado cuenta
que mis rimas y mis prosas,
lejos de ser hermosas
ser formales o excelencias,
son vestigios de vivencias
que a mi alma peregrina
muy plagada de carencias
el mundo banal le asigna...
Un legado de experiencias
que la vida me ha dado,
cosas que he recibido,
cosas que también he dado,
una lucha de impotencias
de amor y desamores
promesas que he olvidado,
valores que he perdido...
Soy un simple trovador
anciano del sentimiento
que va esquivando el dolor
a fuerza del sufrimiento,
de este mundo inquisitorio
pero no me gana en amor
ni el mentado Juan Tenorio...
CAZA
17/03/2014