No podemos pretender vivir anclados en un oscuro y apenado pasado que no hace más que abatirnos y destruirnos poco a poco.
La tendencia casi inconsciente con la que recordamos situaciones a cada instante, es la que no nos permite disfrutar al cien por cien cada uno de nuestros días. Porque solemos comparar el pasado con el presente y viceversa; y es así como sin intención de que así sea, destruímos el futuro. Estar siempre pendientes de un pasado que no hizo más que causar dolor y pena, no es una buena forma de tratar de ser feliz.
Y es que lo bueno de la vida, la esencia de vivir, es saber que serás capaz de lograr todo lo que te propongas y sobre todo que perseguirás tus sueños pase lo que pase.
¿No os sentís realizados al saber que estáis tratando de hacer realidad lo que siempre has soñado? cuando pruebas esa sensación os aseguro que os podéis volver adictos. Así es como poco a poco vamos creando las bases de la pirámide de la felicidad.
Aunque la felicidad no se halle en las mismas cosas para todo el mundo, todos debemos estar de acuerdo en que hacer realidad los sueños y vivir el presente, es un buen comienzo para llegar a alcanzarla algún día.