Aun en mis mas latentes recuerdos, cuando el corazón solo quiere gritar,
aun cuando en las noches sea evidente, la sombra de tu querer sin piedad,
aun en las intrépidas batallas perdidas, con el fin de poder a tu pasión ganar,
y aun en los cimientos de estas palabras, que solo por tu ilusión se pudo plasmar...
Mis días son intensos y muchos de ellos serán eternos,
ya el reloj marca las siete y el olvido se quiere hacer presente,
la sangre fugas se enciende al escuchar aquel nombre que está ausente,
y hoy aquella mirada me abatía deseando que seas por siempre mía...
Ya mis manos no saben acariciar ni sentir lo sublime de un abrazar,
ya mis labios perdieron aquel candor que de tu boca yo podía robar,
ya mis plegarias carecen de sentido cuando tu pasión dejo nuestro nido,
y ya mi cansado pernoctar, muy pronto por rutina me terminara de matar...
Digo mis últimas palabras y me entregare al desaliento,
que encuentres el gran anhelo en otros brazos, y en otros besos,
caminare bajo la sombra de un cálido anochecer que me hará totalmente enloquecer,
y en la penumbra de mi querer, solo esperare, el volver a nacer...