Las arrugas del camino
blasfeman de quien poeta
se apodó. Oscura es la treta
plagiando en el pergamino.
Verso con el desatino
gramatical del engaño;
seducción para el escaño,
pretensión de soñador,
cuando se sabe el autor
el parecido es lo extraño.
Un verso que enamoró
crece en la letra sin filo
zurciendo con un falso hilo
la rima que mancilló.
Engaño al que suspiró;
a la ética, es este asalto.
La falacia queda en alto
cuando el honor se abandona,
lo que la luz no cuestiona
se confunde con un salto.