Andrea Martz
Quema, quema, quema
Noches de sábado.
Cuanto las detesto.
El insomnio se hace mas pesado, el infierno más molesto.
Quisiera poder alejarme, perderme en una maquina del tiempo,
explorar en otros mundos y buscar en los silencios.
Pero se vuelve imposible escapar de la realidad y otra vez me encuentro pensando…porque? …Como?...Hasta cuando?,
entonces quema, quema, quema.
Doy vueltas en la cama, me enredo con las sabanas
Que incapaces de resguardarme de los escalofríos que irrumpen en mi alma
Producto del miedo, quizás de cobardía, me pregunto… ¿porque huyo cada vez que veo la salida?...me he vuelto un inconformista conforme de todo lo que fluye de los demás, cansado de esperar ya no espero nada de nadie y no pido que esperen nada de mí…Detesto las noches de sábado, fustigo no poder huir…no acepto la compañía de extraños pero solo me conozco a mí.
Creo que afuera esta lloviendo…el olor a tierra mojada llega hasta aquí…Abro la puerta en busca de gotas que aplaquen la ansiedad…pero solo consigo mojarme en vano y denotar aun mas mi soledad…Porque?....Como?...Hasta cuando?....
Y el dolor quema, quema, quema…
otra vez.