En el espejo se miran los muertos,
aunque no se ven como comprendereis.
En dicho espejo se ven heridas
de las cuales brota agua líquida y cristalina.
Hay ondas suaves en el espejo
que arrullan al vivo que se mira en él.
¡Hay sanabrés que lloraste ayer!,
pereciste un poco por no olvidar tus muertos.
En el espejo de vida que da agua
sumerge el alma cuando su reflejo le llama.
¡Hay sanabrés que lloras hoy!,
salas este lago con lágrimas tristes.
En el espejo de gotas dulces
se baña la luna antes del amanecer.
Irás sanabrés a bañarte con ella
y llenarás el lago con lágrimas de alegría.
Se dice susurrando en una leyenda recién iniciada
que quien se mira en el lago y no ve reflejado
es porque busca su alma en la transparencia del agua.