esthelarez
283. sEñUeLo De InViErNo
La corona de delicados jazmines y presuntuosas gardenias
muestran nívea su frente y el resplandor de la luna.
En su cuerpo se arropa el frío donde los surcos del tiempo
marcan su risas y tormentos… y un par de estrellas alumbran
el otrora rostro primoroso que se marchita de a poco.
Los cantos mañaneros de las aves jugando en vuelo
ya no distraen sus pensamientos, que de violetas y violas
atosigan los recuerdos, del otrora emblemático tricolor.
La amapola se ha escapado del candor de sus mejillas
y ya la rosa encarnada jugosa y sexi…
de pimienta y pimentón
con el sabor a pecado atractivo y juguetón
abandona el verdor de ayer…
ya no quedan sensuales los labios…
y en un casi encorvado cuerpo
una gran mueca se ilumina
cargada de amor extremo…
de un ramillete de enrojecidos claveles
que palpitan insesantes con ansiedad y contraste
en cada estación marcada y que temprana se marcha
con su esplendor y sin clemencia
para dejar en el pasadola vida,
que reporta los recuerdos de alegrías
y también de sufrimientos…
mientras contempla el crio
que en su ingenuidad camina construyendo su propia historia
pretendiendo dominar, la llegada triunfal a la gloria
y saborear su esplendor… aunque efímero se presente
a cada cual en su momento…
y ya cansado de las vivencias del pasado
y la poca siembra cortada,
alimentarán el mañana que aparecerá presuroso
siendo el único que cantará su triunfo en la vida
de cada esencia humana, de las flores sugestivas,
con su alma de colores de ensueños
y locos olores a primavera y verano
en la caverna del frío y eterno duelo
hasta pasar al eterno hiberno
el más selecto señuelo: el inclemente invierno
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[© y D.A.R de esthelarez de Colombia]
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