Sería bello perder
la memoria entre tus brazos...
mirarte con ojos puros,
sin temor al desengaño,
que tus caricias me roben
ese miedo a otro fracaso,
que tus besos prometieran
una pasión sin engaños.
Sería bello perder
la memoria entre tus brazos...
no recordar el dolor
que aún conservo clavado
como una daga certera
que se interpone a mis pasos,
para avanzar a un camino
que nunca estuvo trazado.
Quisiera perder el aire
y después recuperarlo...
mientras tu boca respira
tan cerquita de mi boca,
aunque todo esté inventado
yo quisiera reinventarlo,
sin pensar que corro el riesgo
de que tú me creas loca.
Quisiera borrarlo todo
y estrenar sobre tu cuerpo
las caricias que en mis manos
llevan años esperando...
y que tus ojos me miren
y jurarles que es muy cierto
que a otros ojos de igual forma
nunca jamás han mirado.
Amarte con toda el alma...
con todo el cuerpo quisiera...
para entregarte la vida
y renacer a tu lado,
y que fuera suficiente
con quererte y que me quieras...
¡pero aún tengo memoria!
¡y el corazón ocupado!