Llora el corazón, y explota,
Al recordar tu partida,
Madre del alma, ¡querida!
Tu recuerdo me lastima,
No sé si por no haber sido
Mejor, al estar contigo.
Me produce un gran dolor,
Pensar que quizá te pude
Haber tenido conmigo.
Pudiste estar a mi lado
Con tus biznietos queridos;
¡Cuántos años han pasado!
El alma sigue llorando
Tu salida de esta vida
Sin despedirnos siquiera.
Me sigo martirizando.