Entre la risa y el llanto;
la tristeza y la alegría;
entre lo blanco y lo negro;
la luz y la oscuridad,
está la simbiosis de mi ser
agazapándose de su historia,
y emerjo con la fuerza de la raza
resultante de la aleación
del oro americano
y del hierro de la espada invasora.
Emerjo rebelde, altiva,
emerjo y me sumerjo en el batallar
diario por la vida,
con lo que soy
con lo que tengo de legado:
sangre y fuego;
Fuego y viento,
tierra y agua americanas.
Sueños fabricados
en la larga noche de los siglos
de explotación.
Emerjo desde el fondo de la tierra
como de un volcán en erupción:
lava, magma y ceniza;
Como fuego…como fuego…