Pequeña mirada,
profunda, sublime,
inspiras amor, felicidad.
Impactas con tus horas de nacida la inmensidad de esta vida
donde hoy sos parte,
donde tú eres vida
donde nos alegras,
donde corazones aún más llenas.
Pequeño ser,
inmenso el sentimiento
de verte, de sentirte,
de vivirte en movimientos visibles,
en eternidad de imágenes,
en momentos de abrazos,
en instantes,
por siempre.
Piedra preciosa,
único diamante,
belleza sin igual eres y serás.
Plena mi alma por saberte,
amarte aún sin conocerte.
Deseosos mis brazos por sostenerte,
por abrazar y pertenecer a tu corazón.
Bienvenida, luz de luces,
con todo cariño, el mundo es para vos.