Tu llegada fue muy esperada,
fue chispa de vida en la nada,
en pleno acercamiento… pleno,
dentro de la cúspide del cielo.
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Los testigos fueron rocío,
mañana, dos brisas muy tibias,
y el sol que tanto nos despertó,
paracaídas que al frío tocó
un abrazo seguro, un lazo,
un trazo de historias en mi voz,
centella de latidos, revivo.
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No lo creía el contexto,
ni el cenicero esperanzado
en otro cigarro enlazado
con alguna carta, o texto.
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El lobby brilla con tus pasos
que rompieron el silencio,
invaden con su tic tac
las hojas que del calendario
caían secas de esperarte.
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Pero llegaste... eso es seguro,
convertiste en cuadros los cuadros
que me hacían otro bestiario,
y calmaste impulsos, pesadillas,
ansias del humo y del cigarrillo,
en definitiva... fue distinto.
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Esa llegada de la nada
cambió todo sin avisar;
pero sin dar demasiado
de algo más que de ti,
hiciste algo más que llegar..
cambiaste el incrédulo
e insipiente contexto:
Encendiste luces,
cambiaste puertas
de abiertas a cerradas,
levaste persianas,
cerraste libros
y tipeaste cartas.
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Sin dar demasiado de ti,
hiciste algo más que llegar
y te lo agradezco..
Derechos de Copyright©
Martin Blythe
Venezuela; 2014