Desde tu partida he perdido mi esencia
la materia de mi cuerpo desvanece
el aliento de tu piel y tu presencia
la falta de tu cuerpo permanece.
Mi alma cual reloj exacto a tu partida
se desgarra al transcurrir cada momento
sin ánimo como electricidad fallida
mi cuerpo entumecido del tormento.
Para volver a sentir la chispa divina
resorte que impulsa a vivir cada día
tus ojos castaños profundos mi vida
necesito tu mirada sobre la mía.
La desesperación que muestro en evidencia
cual sombrío paisaje desolado y frío
la nieve blanca en mi alma por tu ausencia
la esperanza la derrite al tenerte al lado mío.