Faeton

Daré vida a la muerte

In memoriam

 

¿Será verdad que te has ido para siempre,
que ya no volverás,
que no volveré a verte
y que no hay vuelta atrás?

 

Me cuesta tanto creerlo,
creer que algo así pueda ser cierto,
que en unas pocas horas
todo aquello que amaba
se haya desvanecido como en un mal sueño.

 

Si hubiera sabido que te irías
en la creencia de que yo no te quería,
todo habría sido diferente entre nosotros
durante aquellos lastimosos días;
y en verdad,
aunque,
como ahora,
desazonado estaría
-porque tu ausencia es mortal herida-,
al menos me quedaría el consuelo
de haberte dado una digna despedida.

 

Mas,
así como nuestro amor ha sobrevivido a tu muerte,
así también sobrevivirá a la mía;
porque nuestro amor no se perdió en la niebla
como temías;
antes bien,
de tan grande como era,
hubiera podido nublar la celeste esfera.

 

Aunque tus pies se eleven sobre la Tierra,
retengo tu alma en mi alma y,
mediante la alquimia de este poema,
traigo al presente esa vida tuya
que nunca debió haberse escrito en tiempo pasado,
para que cuando ya no estemos ni tú ni yo
siempre haya alguien que nos recuerde.

 

No te has ido del todo,
porque guardo dentro una parte de ti,
la parte que tú querías que guardara
en un lugar oculto y apartado,
de acceso vedado,
donde tu recuerdo no habrá de ser profanado.

 

No te has ido del todo,
porque en la vida que me queda
haré presente lo ausente
y daré vida a la muerte.

 

Aunque ya no seas materia,
no te has ido del todo;
porque vives en mi recuerdo
y el recuerdo lo es todo.

 

© 'Te quiero, no lo olvides. Poemas para Psyche', Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.