ME ROBASTE A MI AMOR.
Sentada solitaria en las arenas
esperando el regreso de su amado
no sabe que la muerte lo ha robado
y solo le queda, llorar sus penas.
Ve unirse el horizonte con el mar
y a ese mar que a su amor se ha llevado
lo tacha de asesino y de malvado
sus ojos son dos fuentes de llorar.
Y espera noches enteras y días
la esperanza de estar equivocada
la convierte en mujer desesperada
esperando que lleguen la alegrías.
Su pelo se ha teñido ya de escarcha
viendo pasar los días y los años
la ausencia de su amado causa daño
esperando en la arena la muchacha
Autor: Joaquín Méndez,
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©copyright. 15/07/ 2014.