Sobre cama horizontal
las sabanas van quemando el sudor del viejo instante
tiempos de placeres semi mudos entre día noche
quejas
lágrimas profanadoras de blancura y suavidad.
Se esparcen bajo el sol aireado de la estrenada tarde
aroma de jabón y seca naturaleza veraniega
mientras se saborea el último sorbo de café
sujetando prendas a una cuerda con coloridas pinzas.
Flotan restos de caricias entre las manos
se diluyen en agua partos de sueño
mientras un aroma a suavidad impregna el aire.
Vuelan adheridos ronquidos en seda
Junto al ultimo beso de sueño.
Xesca Almécija