Y te veo ahi, con tu cuerpo hecho trizas
con la mueca post morten que anuncia
la muerte, se respira alrededor el fetido aroma
de la sangre coagulada, la gente te mira,
como queriendo reconocer tu existencia,
pero ya eres solo un recuerdo, que quedo
arrollado por la inconciencia.
Entre murmullos se escucha la sentencia
y te declaran culpable, no tuviste el cuidado
mirando solo al frente, debiste mirar al costado
donde el claxon apenas se escucho,
sin embargo pensando en tu pasado
la vida en un instante el camion te arrebato.
Ahora se llevan al conductor cabizbajo
aun no entiende como pudo suceder,
él, que salio temprano a su trabajo
sin pensar que esto le iba a acontecer,
ahora cargara en sus internos
el dolor de ser asesino imprudencial,
sin saber que el imprudente
yace tirado en el piso sin posibilidad de hablar.
Ya te pusieron la sabana blanca
que llevaras de tunica al velatorio,
espero ahora te fijes al cruzar
los rios del purgatorio.