Fuiste para mi el incienso
que aromatizó mi vida.
Fuiste lampara encendida
que iluminó mi ilusion.
Fuistes el leño que ardió
para calentar mi almohada
y amaneciste mojada
regada por el amor.
Hoy, dejas mi corazón
vacío como una copa
Donde te tomaste el vino
y quebraste su cristal.
Como queriendo olvidar
el amor que por inmenso.
Nunca lo podras tirar.