Darío Ernesto

A mis viejos

Vengo de un mundo marrón 
de la unión de la luna y el sol 
yo vengo de un encuentro ancestral 
soy la chispa de un sueño de amor. 

Ellos me dieron la luz 
y alumbraron también mi hermandad 
calmando con ternura el dolor 
que dejaba la ausencia del pan. 

En la mirada de mis viejos 
brilla mi infancia feliz 
yo se que alguna vez perderé 
el camino para regresar 
entonces solo un hombre seré 
aquel niño con ellos se irá. 

Es una historia de amor 
con tormenta de miel y de sal 
con sombras que lastiman la piel 
y con flores que da la humildad. 

Como puedo agradecer 
a la vida el deseo de mi 
que se haya imaginado mi ser 
y el encuentro que me hizo vivir. 

En la mirada de mis viejos 
brilla mi infancia feliz 
yo se que alguna vez perderé 
el camino para regresar 
entonces solo un hombre seré 
aquel niño con ellos se irá.


Peteco Caravajal