Presagio
La tarde fría, pasos los ausentes....
Hay sacramento en la melancolía
Y cobijame la nubada ausencia...
¡Oh! ausencia de ausencias no te robes
de la tarde sus geranios...
¡ay, mi tierno capullito, ilusiones
despertame, despertame...
sonrisa amartelada, ¡Salmos en loa al
infinito!
...y elévate en la nada, colibrí,
¡elevate muy alto del sin
mácula, querubīn de mi alma!
Mas, si te asustaren las frías sombras,
colibrí del alma, ¡esas
pústulas!,
incienso de mi alma guardado
entre silencios,
¡Tómalo, guerrero!
lumbre en los bosques señalarente el
sendero
donde no sangren tus pisadas,
¡tu historia es mi historia cuando
tiembla el alba!
¡cuando tiembla el alba
donde no sangren tus pisadas!
¡Ay, mi niño,
quizà en la campiña de fragancia
muerta,
y el armónico silencio,
fuesen los pasos tristes entumecidos
entre las piedras. Más, ya son distantes,
tu risa y mi llanto,
y afanadas tétricas sombras
abrazándonos
en silencio...
¡Oh, mi niño!
¡Corre, salta,
vuela...
no dejes que te
atrapen…!
Ahmed krentel